España registra su mejor mes en lo que a emisiones de toneladas de CO2 a la atmósfera desde el año 2007
Red Eléctrica Española (REE) ha hecho públicos recientemente los datos sobre las emisiones de gases de efecto invernadero que el sistema eléctrico español emite, mensualmente, a la atmósfera. Y el dato de marzo de 2020 no puede ser mejor. Marzo se ha convertido en el mes con menor cantidad de toneladas de CO2 emitidas desde el año 2007. Este dato, clave para hacer de la descarbonización eléctrica una realidad, ha estado favorecido, según apuntilla la entidad gestora de la red eléctrica, por las condiciones climatológicas afines a la entrada de producción renovable y por el impacto derivado de la pandemia del coronavirus.
Durante el mes de marzo, la generación eólica fue la primera fuente de producción eléctrica en España, con un 26,6% del mix, seguida por la nuclear, con un 24,6% y la hidráulica, que alcanzó el 14,8%. Estas tres tecnologías, junto al resto de energías no contaminantes, contribuyeron a que las emisiones se redujesen el pasado mes a los 2.395.406 tCO2; con una equivalencia de 0,11 toneladas de dioxido de carbono por cada MWh de generación eléctrica producido en el país.
Así, durante el pasado mes España fue capaz de generar 7.726 GWh de energía eléctrica con origen renovable, ocupando el tercer lugar en el ranking del histórico de meses de marzo y contribuyendo al sistema energético español con casi la mitad de la producción: un 49,4%.
Tan significativo ha sido este mes que las favorables condiciones climáticas mencionadas anteriormente, impulsaron que, durante la primera semana de marzo, la energía eólica aportase entre el 29% y el 51% del total de producción diaria, sumando su esfuerzo para que el 59,5% de la producción eléctrica española fuese de origen renovable durante esos primeros siete días. Algo a lo que, sumada la energía nuclear, hacía que el 80% de la generación eléctrica española fuese libre de emisiones de efecto invernadero durante el 1 y el 7 de marzo.
La descarbonización de la economía: Green Deal europeo
El pasado mes de diciembre, Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, presentó un ambicioso plan para convertir a Europa en el primer continente climáticamente neutro para el año 2050. Este plan, llamado Pacto Verde Europeo (Green Deal). Este plan fija, como «meta intermedia», el año 2030, para cuando las emisiones se habrán tenido que reducir en al menos un 55% respecto a las mediciones de emisiones obtenidas en 1990 en el territorio de la Unión Europea.
La hoja de ruta fija como metas a alcanzar la neutralidad climática del continente europeo para el año 2050 a través de la descarbonización de la energía (la producción y el uso de la energía representa más del 75% de las emisiones de gases de efecto invernadero de la Unión Europea); la renovación de los edificios, ayudando a reducir sus facturas y uso energético (el 40% del consumo ciudadano energético se corresponde a los edificios); la ayuda a la industria europea para convertirse en líder mundial de la llamada economía verde (actualmente el uso de materiales reciclados en la industria es tan solo del 12%, siendo la industria el foco del 20% de las emisiones totales en territorio comunitario); y el impulso de la movilidad sostenible a través de sistemas de transporte público y privado más limpios, baratos y sanos (el transporte representa el 25% de nuestra emisiones nocivas a la atmósfera).