Blog, Tendencias

¿En qué consiste el Objetivo de Desarrollo Sostenible 7?

El Objetivo de Desarrollo Sostenible 7, Energía Asequible y no Contaminante, se postula como un reto “clave” para el futuro de nuestras sociedades; veamos por qué

¿Imaginas tu vida sin acceso a la energía, sin electricidad? Vivimos en un mundo donde el acceso a una energía fiable y sostenible se torna en un asunto fundamental para el desarrollo de una comunidad o una sociedad. La prestación de los servicios más esenciales (enseñanza, medicina, agricultura, industria, infraestructuras, comunicaciones…) se tornaría en una auténtica odisea, impidiendo el desarrollo de una vida digna. Esta situación, que quizá para muchos es una simple teoría, es la realidad en la que aún viven 1.200 millones de personas a nivel mundial, cuyo acceso a servicios modernos de electricidad es todavía un espejismo. La mayoría de estas personas, a las que el Objetivo de Desarrollo Sostenible 7 pretende ayudar, se concentran en una docena de países de África y de Asia. Además, prácticamente 3.000 millones de personas (alrededor de tres veces la población de China), dependen aún de la combustión de madera, carbón, carbón vegetal o desechos de origen animal para cocinar y calentar su comida cada día.

Poner remedio a estas y otras grandes quimeras energéticas de nuestro mundo es el motivo por el que, durante la confección de la Agenda 2030, se estableció el Objetivo de Desarrollo Sostenible 7 (ODS 7): Energía Asequible y no Contaminante. Y es que, además del acceso como tal a la energía eléctrica, este reto plantea dar la vuelta al gen contaminante que predomina en una gran parte de la energía que consumimos en nuestro día a día. No podemos olvidarnos que alrededor del 60% de todas las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero nacen de la generación y consumo de la energía; motivo por el que un cambio de modelo de generación hacia energías renovables (el 17,5% del total del consumo mundial de energía fue de origen renovable en 2015) y la electrificación de la economía se presentan como claves para la consecución de este reto.

Además, resultaría irresponsable olvidar que el uso de este tipo de energías contaminantes no sólo perjudica al medio ambiente, sino que también afecta a la salud de las personas. Tal es así que, lejos de las enfermedades que la polución provoca en nuestras sociedades, la contaminación de aire en locales cerrados debido al uso de combustibles para calentar el hogar o la comida es la causante de 4 millones de muertes prematuras cada año.

¿Cuáles son las metas del Objetivo de Desarrollo Sostenible 7?

Al igual que el resto de objetivos de desarrollo sostenible, la solución de los problemas anteriormente plantando pasa por una serie de metas tangibles en el horizonte de los próximos años. Veamos cuáles son:

  • 7.1  Garantizar el acceso universal a servicios energéticos asequibles, fiables y modernos
  • 7.2  Aumentar considerablemente la proporción de energía renovable en el conjunto de fuentes energéticas
  • 7.3  Duplicar la tasa mundial de mejora de la eficiencia energética
  • 7.a  Aumentar la cooperación internacional para facilitar el acceso a la investigación y la tecnología relativas a la energía limpia, incluidas las fuentes renovables, la eficiencia energética y las tecnologías avanzadas y menos contaminantes de combustibles fósiles, y promover la inversión en infraestructura energética y tecnologías limpias
  • 7.b Ampliar la infraestructura y mejorar la tecnología para prestar servicios energéticos modernos y sostenibles para todos en los países en desarrollo, en particular los países menos adelantados, los pequeños Estados insulares en desarrollo y los países en desarrollo sin litoral, en consonancia con sus respectivos programas de apoyo

¿Cuánto costaría lograr el ODS 7?

Establecidas las metas y las soluciones propuesta, toca pensar en cómo podemos, desde el punto de vista económico, atajar esta problemática. Así, según informan las propias Naciones Unidas, sería necesario triplicar la inversión anual en infraestructuras de energía sostenible, pasando de un gasto actual cifrado en torno a los 400.000 millones de dólares actuales a los 1,25 billones de dólares en 2030.